//Pr. Luis A. Núñez\\

Nuestra vida no puede resumirse en ser solo efímera o pasajera, tienes la oportunidad de dejar un legado, de hacer historia.
“Jehová cumplirá su propósito en mí; Tu misericordia, oh Jehová, es para siempre; No desampares la obra de tus manos” (Salmos 138:8)
“Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados” (Romanos 8:28)
“Quien nos salvó y llamó con llamamiento santo, no conforme a nuestras obras, sino según el propósito suyo y la gracia que nos fue dada en Cristo Jesús antes de los tiempos de los siglos” (2 Timoteo 1:9)
“Muchos son los planes en el corazón del hombre pero el consejo (propósito) del Señor permanecerá” (Proverbios 19:21)
La palabra traducida al español como consejo es etsá en el hebreo y se repite en muchos versículos y uno de sus significados es propósito.
- Dios es un Dios de propósito
La primera cosa que debemos comprender es que Dios siempre es un Dios de propósito, todo lo que hizo lo hizo con un propósito.
“El consejo (propósito) del Señor permanece para siempre los designios de su corazón de generación en generación” (Salmos 33:11)
Si te das cuenta, en el Génesis, aunque el significado del nombre de este libro sea origen, en realidad no es el origen, es más bien el resultado de sus planes. Dios no improvisó, Dios soñó, proyectó y ejecutó sus planes en el Génesis y a partir de allí comenzó su proyecto.
- Dios creó todo con un propósito
Dios no creó todo solo con un propósito, sino con la capacidad y el poder de cumplir ese propósito. El propósito de algo determina su naturaleza, su diseño y sus características. Tú no haces nada sino hasta que sabes exactamente lo que quieres y por qué lo quieres, tú no vas a empezar a construir algo esperando que algún día se convierta en algo útil ¡no! su propósito y su sdiseño están completos aún antes de que empieces con la construcción. Por ejemplo, David fue designado por Dios con un propósito, ser el próximo rey de Israel y aunque era pequeño ante Goliat, él fue capacitado para vencer, ¿sabes cómo? Sabiendo que era amado. David significa amado. La manera de vencer a tu Goliat es sabiendo que eres amado. Por la revelación de esa verdad todos somos potencialmente vencedores ante nuestros Goliat. Uno de los propositos de Dios para ti es que reines en vida.
“Pues si por la transgresión de uno solo reinó la muerte, mucho más reinarán en vida por uno solo, Jesucristo, los que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia” (Romanos 5:17)
La buena noticia es que no depende de ti, sino del que habita en ti. Lo que quiero que entiendas es que además del propósito de Dios para ti, has sido potencializado para cumplirlo, porque Dios es un Dios que hace las cosas perfectas. Dios no solo te llamo con un propósito, él te da la capacidad para cumplir ese propósito.
“Que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación” (2 Corintios 5:19)
- No todos los propósitos son conocidos por nosotros
Aunque todos y todo en la tierra tienen un propósito, no significa que estamos conscientes de todos los propósitos. Imagina a alguien que hubiera hecho una compra de algo costoso, sofisticado o de una pieza de algún equipo y al mismo tiempo tiró a la basura el manual del fabricante, si logra que algo funcione, bajo esas circunstancias, es pura suerte, de hecho, lo más probable es que nunca logre que funcione de manera adecuada, asi tú también puedes perder muchas de las características y funciones que tienes, si no cumples tu propósito completo, por esto debemos presentarnos ante Dios para pedir que nos revele su propósito.
- Donde no se conoce el propósito el mal uso es inevitable
Supongamos que tú eres Henry Ford y le pones un motor a un carruaje con el propósito de qué la gente se movilice, pero alguien, que no conoce para que funciona, quiere usar el carruaje motorizado como una lancha y lo lanza al agua ¿qué crees que va a pasar? Se va a producir un gran daño. Tú puedes hasta tener una buena intensión, pero si no conoces el propósito solo vas a estar sinceramente equivocado.
La mayoría de personas entran en el matrimonio aparentemente de forma muy seria, ellos van a la iglesia y delante del altar le dicen a su futuro cónyuge “te voy a amar hasta que la muerte nos separe”, pero a los pocos meses o al poco tiempo están separándose o peor aun divorciándose. Todos se preguntan ¿qué pasó? Y la respuesta es simple, no entendieron el verdadero propósito por el cual se estaban casando; simplemente le dieron mal uso a su unión. Ellos necesitan descubrir el plan de Dios para su matrimonio, porque de otra manera ellos se van a lastimar, aunque no tengan intención de hacerlo y van a terminar mal.
Si quieres descubrir el propósito de alguna cosa, pregúntale al mismo fabricante, porque él es el que lo diseñó y nadie más lo conoce verdaderamente. En otras palabras el fabricante incluyó en el manual la instrucción para protegerte de no mal utilizar el producto, con la intensión de que pudieras disfrutarlo plenamente y no hagas de una guitarra un bate para poder golpear a alguien.
Antes de querer encontrar soluciones pasajeras en su matrimonio, por ejemplo, deberían preguntar a Dios ¿cuál es el propósito de su matrimonio? Lo mismo con mi ministerio, con mi liderazgo, etc.
- Encontramos el propósito solo en la mente y en el corazón de nuestro Creador
Necesitamos entender la mente de nuestro creador, el corazón de nuestro creador cómo podemos hacer eso por medio de aprender la manera como él piensa, la única manera en que nosotros podemos tener éxito es por medio de descubrir y vivir en los propósitos de nuestro Dios, pasando a través de una transformación aún en la forma en que pensamos en nosotros mismos para que lleguemos a hacerlo basado en las intenciones originales que él tiene para nosotros esta transformación viene a través de la renovación de nuestra mente.
“Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional. No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta” (Romanos 12:1-2)
La mejor manera como puedes encontrar el propósito es por medio de someter tu vida totalmente al fabricante, debes acercarte a Dios porque tú quieres encontrar la manera de no seguir desperdiciando tu vida. Nadie te conoce tan bien como aquel que te creó, ese es el punto para partir.Somos tan especiales y amados por Dios que Él mandó a su unigénito hijo para que muriera por nosotros. Debe haber algo único y especial en cada uno de nosotros para que Dios quiera que recibamos salvación.
“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna” (Juan 3:16)
“De tal manera” implica la dimensión, el valor de la transacción.
“Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios” (1 Corintios 6:20)
Quiero que consideres este ejemplo, si tú encuentras un objeto que cuesta 500 soles y lo compras, significa que crees que ese objeto vale más que tus 500 soles, por eso estás dispuesto a cambiar tus 500 soles por ese objeto ¿estás comprendiendo? de tal manera Dios nos amó que entregó a su hijo unigénito por nosotros, el precio que Dios pagó por nosotros fue su hijo. Por tanto confía en Él, en sus propósitos para ti y desea cumplir esos propósitos.
- El propósito es la clave para nuestra realización
Nunca podrás estar completamente satisfecho hasta que llegues a encontrar tu propósito y que comiences a vivir en él. Si tú no haces aquello para lo cual has sido creado, nunca te sentirás satisfecho, sentirás que estás perdiendo el tiempo o desperdiciando tu vida.
Una de las cosas que les sucede a todas las personas cuando tienen una avanzada edad, es que sienten que desperdiciaron su vida, que no hicieron lo que deberían haber hecho, por eso el Señor dice que cuando Él entra en la vida de alguien obra para restaurar sueños. Cuando haya un mover, un avivamiento en tu vida, los ancianos soñarán sueños y eso significa que otra vez comenzarán a tener una ilusión, un deseo, porque comprenderán los planes de Dios para su vida.
“Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones” (Joel 2:28)
El Señor tiene un plan de restauración de sueños, cuando acudes a Él, sabe cómo hacer para que recuperes el tiempo que has perdido, este es el año de la restitución.
“Vosotros también, hijos de Sion, alegraos y gozaos en Jehová vuestro Dios; porque os ha dado la primera lluvia a su tiempo, y hará descender sobre vosotros lluvia temprana y tardía como al principio. Las eras se llenarán de trigo, y los lagares rebosarán de vino y aceite. Y os restituiré los años que comió la oruga, el saltón, el revoltón y la langosta, mi gran ejército que envié contra vosotros. Comeréis hasta saciaros, y alabaréis el nombre de Jehová vuestro Dios, el cual hizo maravillas con vosotros; y nunca jamás será mi pueblo avergonzado. Y conoceréis que en medio de Israel estoy yo, y que yo soy Jehová vuestro Dios, y no hay otro; y mi pueblo nunca jamás será avergonzado” (Joel 2:23-27)
“Acuérdate de tu creador en los días de tu juventud antes que vengan los días malos y se acercan los años en los que digas no tengo en ellos contentamiento” (Eclesiastés 12:1)
En realidad, el Señor te está diciendo “acuérdate hoy mismo y busca los propósitos que yo tengo para ti, no esperes echar a perder tu vida para acordarte de mi”. Este es el momento de acudir al fabricante para que tengas la dirección correcta en los días que te quedan de vida.
Cuando una persona trabaja en una construcción muchas veces el contratista solo te dice que cabes un hoyo o una zanja y aunque él no pueda entender para qué es esa zanja, él tiene que confiar en las indicaciones del contratista. Él escarba esa zanja porque sabe que el contratista conoce el plano, de la misma manera, Dios está en el negocio de construir, de edificar nuestra vida y nosotros mismos estamos siendo parte de ella. Dios es el contratista, el constructor y algunas veces te dirá que hagas algo sin darte explicaciones, pero necesitas confiar. Muchas cosas a tu alrededor acontecen y no entiendes el porqué, ahí es necesario que te acerques al constructor y pregúntale ¿cuál es el propósito que él tiene para ti? ¿qué es lo que él quiere hacer a través de tu vida?
“Como aguas profundas es el consejo (propósito) en el corazón del hombre; más el hombre entendido lo alcanzará” (Proverbios 20:5)
Dios te está diciendo que él que colocó ese propósito en ti, produce el querer como el hacer. Dios ha colocado muy profundamente dentro de ti su propósito, pero para que puedas sacar ese conocimiento necesitas de la sabiduría, de revelación de Dios. Recuerda que Dios creó al hombre con un propósito específico en su mente y que lo diseñó en forma única con base en ese propósito, por lo tanto el hombre posee características y cualidades que son necesarias para su funcionamiento y para su realización como hombre.