[sc_embed_player_template1 fileurl=”https://iglesialavid.org/audios/mp3/161114M8%20PrLuisA_ElDiezmo.mp3″]
Como su nombre lo indica es el diez por ciento de algo, es la décima parte de algo. Ahora se que hablar de diezmo es realmente algo muy incomodo para muchos pastores, porque parece que no los hace muy populares, o son criticados y es que tiene que ver con algo que ahora es muy usado por El mundo para criticar a la iglesia, constantemente escucho de muchos que dicen a mi papa o esposo le gusta mucho la iglesia, pero eso de los diezmos no le gusta nada, pero recuerden que el mundo está bajo el maligno.
Generalmente aquellas personas que se oponen al diezmo, no son muy generosas para ofrendar a Dios. Generalmente, ellas nunca contribuyen de forma, constante. No conozco alguien que predica contra el diezmo y quiere contribuir más. Tenga mucho cuidado nuestra teología debe llevarnos a ser excelentes, pero nunca negligentes. Quiero por tanto presentarles un pequeño estudio sobre el establecimiento del diezmo de manera histórica en la Biblia.
1.- El diezmo se daba antes de La ley
Muchos dice que el diezmo solo se daba en la ley, que es una cuestión de la ley
La primera mención del diezmo se encuentra en Génesis 14: 18-20, allí, leemos que Abraham volviendo de una guerra. Después de haber luchado con contra el rey Quedorlaomer y triunfado sobre ellos el estaba volviendo para su casa con los despojos de guerra. Abraham, en aquel momento, volvía victorioso. Y se encuentra con un personaje misterioso, llamado Melquisedec.
Melquisedec, rey de Salém, trajo pan y vino; era sacerdote del Dios Altísimo; al cual le entrego el diezmo de todo. Gn. 14:18-20.
Melquisedec es mencionado en dos lugares más en la Biblia: en el Salmo 110:4 y en Hebreos capítulo 5 al 7. En Hebreos, Melquisedec es presentado como un tipo, una ilustración de Cristo.
Melquisedec no exigió nada, pero Abraham tubo la revelación que aquello era lo más apropiado a hacer. El dio el diezmo voluntariamente. Eso sucedió 400 años antes de que la Ley sea establecida.
Abraham reconoció que todo lo que tenia era por la gracia de Dios que la victoria obtenida era la gracia de Dios es allí que el da el diezmo y es que el diezmo solo es el reconocimiento de que todo lo que tenemos es dado por Dios. Otro ejemplo lo vemos en la historia de Jacob, (Gn 28.10-12,16-22). Esta es la segunda mención de diezmo en la Biblia, cuando Jacob reconoce que el lugar era casa de dios el tiene la revelación del diezmo y es que diezmo y la casa de Dios están relacionados.
Ahora después de 400 años se establece la ley mosaica. En Levítico 27:30-34 leemos sobre o estabelecimiento del diezmo.
El diezmo de la tierra, tanto de la simiente de la tierra como del fruto de los árboles, es de Jehová: es cosa dedicada a Jehová. 31Si alguien quiere rescatar algo del diezmo, añadirá la quinta parte de su precio por ello.
32»Todo diezmo de vacas o de ovejas, de todo lo que pasa bajo la vara, el diezmo será consagrado a Jehová. 33No mirará si es bueno o malo, ni lo cambiará; y si lo cambia, tanto él como el que se dio a cambio serán cosas sagradas: no podrán ser rescatados».
34Estos son los mandamientos que ordenó Jehová a Moisés para los hijos de Israel en el monte Sinaí.
Después de 1000 años de esto Dios nos muestra en su palabra Malaquías 3:8-12:
Donde hace una expresión fuerte de acusar a su pueblo de robarle, y como consecuencia traer sobre si maldición.
El diezmo en el Nuevo Testamento
En mateo 23:23 El Señor Jesús reprende a los fariseos y escribas por su religiosidad, y les aclara que era necesario diezmar pero sin dejar la misericordia y la justicia, y en I Corintios 16:1-2, el apóstol Pablo nos muestra todavía un principio inmenso sobre la ofrenda basada en la gracia, es decir “el dar según haya sido prosperado”, es decir lo que doy esta estrechamente relacionado al reconocimiento de la bendición de Dios en mi vida, es decir quien da el diezmo no ha hecho nada excepcional en su actitud de gratitud porque el diezmo le pertenece a Dios apenas le damos lo que es de Él, pero esta ofrenda es mayor porque es el reconocimiento de gratitud, es reconocer la gracia.
Pr. Luis Alberto