Conductas de vida cristiana II

repro//Pr. Luis A. Nuñez\\

creyenteLas dos cuestiones más involucradas con la caída son la ropa y la comida.

LA COMIDA

¿QUE COMER?

1.    No necesitamos ser vegetarianos

Antes de la caída del hombre, Dios le dio a él todo tipo de fruta como comida; la verdad es que el hombre solamente comenzó comer carne después de la caída.

“Todo lo que se mueve y vive, os será para mantenimiento: así como las legumbres y plantas verdes, os lo he dado todo”. (Génesis 9:3)

Muchos entonces dicen que debemos ser vegetarianos como lo fue Adán, pero nadie dice que debemos andar desnudos como anduvo Adán. Tanto la ropa, como el comer carne fueron dados por Dios después de la caída. Todo el equilibrio ecológico es basado en la muerte, un animal devorando a otro. Cuando un hombre come carne está diciendo que necesita derramamiento de sangre para poder vivir.
Veamos Romanos 14:2-6:

Vemos que algunos cristianos pensaban que ser vegetarianos era el patrón de Dios, como lo fue en el Edén, pero Pablo menciona que esta clase de cristianos eran débiles de conciencia y fe.
Es importante notar que todo se alteró después de la caída, la tierra ahora produciría cardos y espinos; entendemos que antes de la caída los vegetales suplían toda la necesidad proteica del cuerpo, sin embargo, en este tiempo solo algunos vegetales cumplen este requerimiento, por ejemplo existen pocos vegetales que tienen lisina, un aminoácido esencial, entre ellas la kiwicha. La mayor fuente de proteínas son las carnes.

2.    Una doctrina de demonios

1 Timoteo 4:1-5
Prohibir el matrimonio y la comida son señales de la acción del maligno. En los últimos días surgirán personas diciendo que nos volveremos más espirituales por causa de la comida y la castidad.

3.    La sangre es prohibida

Si por un lado vimos que se puede comer carne, por otro lado vemos que la palabra de Dios nos prohíbe expresamente comer la sangre. Esta orientación fue dada a Noé en Génesis 9:3, confirmada por la ley en Levítico 17:10-16 y después confirmada por los apóstoles en Hechos 15:19-20; vemos entonces que la sangre fue prohibida en tres dispensaciones.

4.    La comida sacrificada a los ídolos

Pablo, en su primera epístola a los corintios (1Co8, 1-13; 10,14-33) nos da una orientación sobre la comida sacrificada a los ídolos. Pablo dice que el ídolo no es nada y la comida no nos puede dañar, pero si al consumirla escandalizamos a algún hermano entonces es mejor no hacerlo. Podemos ir al supermercado y comprar todo, podemos ir a casa de alguien y comer todo sin preguntar, pero si alguien te dice que la comida ha sido consagrada a algún ídolo entonces debes rechazarla, no por causa de la comida en sí, sino para no escandalizar a nadie.

Conclusiones.
a.    La comida es para el cuerpo y no el cuerpo para la comida; no podemos hacer de la comida nuestro Dios y tampoco ocupar todo nuestro tiempo pensando en comer.

b.    El objetivo de la comida es la nutrición, necesitamos ser cuidadosos con cualquier tipo de comida que perjudica nuestra salud. Esto sin embargo es una cuestión personal y no de pecado delante de Dios. No significa que no debemos tener placer alguno en la comida, podemos comer por placer también, no necesitamos comer solo lo que es desagradable.

c.    El objetivo es la satisfacción, si estamos contentos entonces no necesitamos comer más de lo necesario.

LA BEBIDA  
Mateo 11:16-19
En esta porción de la Palabra vemos que el Señor Jesús no dio reglas externas para gobernar la vida del cristiano. Mientras Juan estuvo en el desierto Jesús estuvo en las bodas de Caná. A partir del momento en que poseemos la Gloria de la presencia de Dios todas esas cosas pierden su importancia. Pablo dijo que la realidad del reino de Dios no es comida ni bebida más sí justicia, paz y alegría en el Espíritu Santo (Romanos 14:17)

1.    La cuestión del vino
La palabra “vino” en nuestro idioma tiene su origen en la palabra hebrea “yayin” equivalente a la palabra griega “oinos” y también a la palabra latina “vinus”. Esa palabra aparece en Génesis 9:21 y 19:32, donde por sus efectos no hay duda que era el mismo vino que fue consumido descontroladamente. La palabra “tirosh” que aparece en Números 18:12, Nehemías 10:37 y Joel 2:24 fue traducida en las mejores versiones de la Biblia como mosto o vino nuevo. En el pasaje de Joel no hay duda de que era mosto, pues aún estaba en el lagar, ciertamente aún no había fermentado. Sin embargo, en otros pasajes es traducido como vino o vino nuevo.

La vendimia está relacionada con la época, se realiza una vez por año, lo natural era tener el mosto solo en esa época, en los días en el que las uvas eran pisadas, esto porque en esta época no existía la cultura de construcción de invernaderos para obtener uvas fuera de época, ni medios de congelación para conservar el mosto, esas técnicas son actuales. Había también el “mesek” o “mimsak” que aparece en salmos 75:8, proverbios 33:30 e Isaías 55:11, que era el vino mezclado con especias.

2.    La utilidad del vino
Es evidente que la mayor utilidad del vino o como vulgarmente se le conocía “vino del año”, “yayin” del antiguo testamento o el “oinos” del nuevo testamento era para ser bebido con las comidas. Era la bebida del pobre, accesible a la minoría, aunque hubiese otro tipo de vino con mayor calidad.

Sin embargo, en varios pasajes bíblicos notamos que el vino era utilizado como medicamento. Es el caso de Lucas 10:34, en la parábola del buen samaritano, en el que el samaritano echa vino y aceite en las heridas, también en 1 Timoteo 5:23, el caso de Pablo aconsejando a Timoteo beber un poco de vino por causa de sus enfermedades.

También Melquisedec, rey de Salem y sacerdote del Dios altísimo, tantas veces citado como un ejemplo digno de seguir, en el momento en el que se habla del diezmo (Génesis 14:18) dice que trajo pan y vino (yayin). En varios pasajes encontramos referencias al pan, vino y aceite. Las bases de la alimentación en el antiguo testamento.

3.    La actitud de Jesús frente al vino
Es el ejemplo de Jesús el que nos interesa, veamos en primer lugar lo que es posible conocer sobre el vino en el contexto cultural en el que Jesús vivía.

En el Israel de aquella época, existían los que exageraban en el consumo del vino y otras bebidas de contenido alcohólico mucho más alto, pero también existían los que se abstenían del vino, como era el caso de los recabitas, una comunidad nómada que no practicaba el cultivo de la vid, ni cualquier otro tipo de agricultura, como vemos en Jeremías 35:12-15. Había también algunos casos en los que se abstenían del vino y ciertas comidas, generalmente durante un cierto periodo de tiempo para dedicarse a Dios y también tenemos a los que hacían el voto del nazareo, como era el caso de Juan el Bautista, estos no bebían vino ni comian uvas frescas o secas, por lo tanto tampoco podían beber del mosto de la uva, como vemos en Números 6:3.

Leyendo los evangelios atentamente y sin preconceptos, tenemos que concluir que Jesús bebía vino normalmente, como bebían todos en su contexto cultural, inclusive en Mateo Jesús es acusado erradamente de ser comelón y borracho (Mateo 11:19) Claro que no podemos aceptar esta acusación, lo que debe de haber sucedido es que los seguidores de Juan el Bautista imaginaron a un mesías muy parecido al tipo de su maestro y cuando vieron que Jesús en lugar de aislarse en el desierto o en el interior del templo buscó acercarse a los pobres sin hacer ninguna distinción, se escandalizaron y  más aún al ver a Jesús bebiendo con los pecadores, por eso lo acusaron de borracho.

La biblia presenta varios pasajes en los que se alerta del abuso del vino, encontramos esos avisos en 1 Corintios 5:11 y 1 Corintios 6:10, Gálatas 5:21,  Efesios 5:18 y 1 Pedro 4:3.
Conclusión

a.    El vino era una bebida que generalmente era parte de las comidas en el contexto cultural en el que Jesús vivió. Jesús estaba integrado a su cultura, tomaba vino así como todo hombre de su tiempo.
b.    Vino o “oinos” como aparece en griego, es producto de la fermentación del mosto de la uva, nadie en esa cultura confundiría el vino con el aguardiente.
c.    Todavía no es recomendable el consumo de bebidas fuertes (cañazo, whisky, etc.) a no ser que sea con mucha moderación, por los motivos que la medicina nos muestra. Y en el caso del vino, de genuina uva, debemos tener el mismo cuidado, pues los efectos beneficiosos para nuestro organismo solo son válidos si bebemos con moderación.
d.    No hay ningún pasaje del nuevo testamento en el que se prohíba el vino.
e.    Encontramos pasajes en el que se alerta del abuso del vino.

“No seáis tropiezo ni a judíos, ni a gentiles, ni a la iglesia de Dios; como también yo en todas las cosas agrado a todos, no procurando mi propio beneficio, sino el de muchos, para que sean salvos” 1 Corintios 10:32-33.

Es importante entender según este versículo que en nuestro medio las bebidas alcohólicas están relacionadas al alcoholismo, por tanto no podemos ser tropiezo a las personas, todo me es licito pero no todo conviene; además la Biblia dice que debemos actuar con amor por los más débiles. Hoy en nuestro medio se ha limitado el consumo a un brindis en un matrimonio, en una reunión de trabajo o en algún almuerzo familiar, pero de allí a beber vino en todo lugar o inclusive bebidas como la cerveza sugiero que no lo hagan por testimonio, recuerde que usted es luz.

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